Los analistas de Wall Street admiten el ocaso del dólar estadounidense
Los analistas de Wall Street predicen que se avecinan tiempos difíciles para el dólar estadounidense. ¡Incluso admiten un colapso de la principal moneda de reserva del mundo! Las empresas financieras de Wall Street han rebajado sus perspectivas sobre el dólar. Su posible caída se atribuye a varios factores, entre ellos una serie de recortes de las tasas de interés, la desaceleración del crecimiento económico y las políticas comerciales y fiscales aplicadas por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Los analistas de Morgan Stanley prevén que, a mediados de 2026, el dólar estadounidense se debilitará hasta alcanzar los niveles registrados durante la pandemia de COVID-19. Los expertos de JPMorgan Chase & Co. comparten este pesimismo hacia la moneda estadounidense. Los economistas de Goldman Sachs Group Inc. expresan esta opinión y sugieren que los esfuerzos de Washington por buscar fuentes alternativas de ingresos en medio de posibles problemas arancelarios debilitarán aún más el dólar estadounidense.
A principios de esta semana, el dólar perdió terreno frente a las principales divisas en medio de la escalada de las tensiones comerciales mundiales. El índice Bloomberg Dollar Spot cayó un 0,5 % y siguió bajando, acercándose a su nivel más bajo desde julio de 2023.
En una nota fechada el 31 de mayo, los analistas de Morgan Stanley advirtieron sobre una caída del dólar y un fuerte aumento de las curvas de rendimiento. El banco espera que el índice del dólar estadounidense (DXY) caiga aproximadamente un 9 % en 2026, hasta alcanzar unos 91 puntos.
Los analistas de JPMorgan comparten esta opinión. La semana pasada, empeoraron su perspectiva bajista sobre el dólar y aconsejaron a los inversores que centraran su atención en el yen, el euro y el dólar australiano. Morgan Stanley había definido anteriormente el euro, el yen y el franco suizo como monedas que probablemente se beneficiarían de la debilidad del dólar.
Los estrategas de Wall Street también están cada vez más preocupados por los riesgos fiscales en Estados Unidos. En este contexto, los estrategas monetarios de Goldman Sachs están siguiendo de cerca los posibles cambios en la legislación fiscal estadounidense.
Estos cambios están ocultos en un proyecto de ley sobre impuestos y gasto que Donald Trump está impulsando en el Congreso. La legislación propuesta incluye impuestos más altos sobre los ingresos pasivos, como los intereses y dividendos obtenidos por los inversores que poseen billones de dólares en activos estadounidenses.
«Incluso si la ley se aplica de forma selectiva, el riesgo de inversión en Estados Unidos persistirá. Los inversores ya están reevaluando las correlaciones entre activos, considerándolo una razón para diversificar y reducir la exposición a las posiciones estadounidenses», señaló Goldman Sachs.
Anteriormente, los analistas de Goldman Sachs afirmaron que el dólar estaba sobrevalorado en un 15 %. En su opinión, la depreciación adicional del dólar se verá impulsada por la redistribución y la revalorización de los activos a nivel mundial.