Los índices asiáticos subieron ligeramente después de que el presidente Donald Trump dejara abierta la posibilidad de nuevas negociaciones comerciales, proporcionando un respiro a los mercados tras la introducción de nuevos aranceles para una serie de países. Los inversores recibieron con alivio la insinuación de una solución diplomática, aunque se mantienen alerta, considerando la imprevisibilidad de la política comercial de EE. UU. Sin embargo, este optimismo momentáneo no debe eclipsar el panorama general. Los nuevos aranceles ya están teniendo un impacto negativo en las cadenas de suministro globales y en el crecimiento económico. Las empresas están revisando sus estrategias y buscando proveedores alternativos, lo que crea una incertidumbre adicional. A corto plazo, los mercados estarán muy atentos a cualquier señal que indique avances en las negociaciones comerciales. Cualquier noticia positiva podría provocar un rally, mientras que signos de estancamiento podrían nuevamente provocar una ola de ventas.
Los índices de Japón y Corea del Sur —dos países respecto a los cuales ayer se introdujeron aranceles más altos— subieron, mientras que el índice asiático más amplio se incrementó un 0,3%. El won se fortaleció, mientras que el índice del dólar cayó un 0,2%. El euro subió un 0,3% ante la expectativa de que EE. UU. proponga a la Unión Europea un acuerdo con un arancel del 10%.
Tarde en la noche del lunes, Trump declaró que todavía está abierto a negociaciones y pospuso el aumento de aranceles al menos hasta el 1 de agosto, lo que suavizó las preocupaciones de los mercados. Es evidente que los inversores no prestan atención a los últimos anuncios sobre aranceles, viéndolos como una táctica para acelerar las negociaciones, y no como una decisión final.
Por ahora, toda la atención se centra en la Unión Europea, que se esfuerza por concluir un acuerdo comercial preliminar con EE. UU. antes de que finalice esta semana, lo que permitiría fijar una tasa arancelaria del 10% tras el plazo del 1 de agosto. Los medios de comunicación informan que EE. UU. ha propuesto un acuerdo que mantendría aranceles base del 10% con excepciones para sectores sensibles.